Desde el pasado 15 de diciembre y hasta la fecha, la unidad ha aplicado el sistema 3D en quince cirugías gastrointestinales. Las intervenciones se hicieron mediante la técnica NOTES, que utiliza los orificios naturales del cuerpo y minimiza las cicatrices y agresiones al paciente, y por vía laparoscópica, también mínimamente invasiva. Las dos formas de operar se valen de una cámara endoscópica que se introduce en el paciente mediante un orificio de pocos centímetros. Las imágenes permiten al cirujano situar la lesión y operar con la ayuda del instrumental también introducido por pequeños orificios.
Sin necesidad de practicar una gran incisión, el médico ve como si estuviera dentro del cuerpo del paciente, o incluso mejor. El nuevo tipo de cámara proporciona profundidad de campo, más ángulos de visión, e, incluso, mejor calidad de imagen ya que se puede llegar a palpar la textura de los órganos.
El director general del Clínic ha explicado que, al igual que se hace con otros proyectos, en el caso de la laparoscopia 3D se ha evaluado con criterios de coste beneficio, aunque no ha detallado la inversión.
Por su parte, el jefe de Cirugía Gastrointestinal sí que ha aventurado que las operaciones con laparoscopia en 3D son «más baratas» porque se ahorra tiempo y no es necesario utilizar algunos aparatos como el de sutura mecánica, que cuesta unos 500 euros.
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Anastasya Kolesnykova