La Asociación de Editores Españoles (Aede) se ha sumado a las denuncias contra Google abiertas ante la Comisión Europea desde noviembre de 2010. En esa fecha fue cuando Joaquín Almunia, vicepresidente de la Comisión y comisario europeo de Competencia, decidió abrir una investigación contra el buscador tras recibir denuncias de varios portales comparadores de precios y de la Asociación Alemana de Editores de Periódicos.
Los editores españoles entienden que el buscador abusa de su posición dominante con el fin de utilizar los contenidos de los diarios digitales sin disponer de autorización no ofrecerles ningún tipo de remuneración. Alegan también que al enlazar directamente a las noticias los usuarios no pasan por las portadas de los diarios, lo que merma sus ingresos publicitarios.
Para evitar esto, Google posee una función, denominada opt-out, que permite eliminar de su motor de búsquedas a aquellas páginas webs que los deseen. Sin embargo, los editores consideran que, debido a la preeminencia de Google en España, llevar a cabo esta solicitud supondría la desaparición de dicha página web en internet.
Teniendo en cuenta todo esto, la Aede considera que Google vulnera el artículo 102 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea y que ejerce un abuso de posición dominante. A juicio de los editores españoles, la única solución a este conflicto es que el buscador pague a los medios por los contenidos ajenos de los que se nutre y beneficia.
Rubén Gómez-Rico Fernández